El día 25 de julio del año 2008, día en que la maestra Regina Betancourt de Liska programo un curso muy especial del cual lamente de no poder asistir en razón de la realización de una misa en honor de un familiar.
Terminado el evento nos dirigimos a casa; yo continuaba molesto por no haber podido ir al curso de avanzados con la maestra Regina.
Mientras mi hijo menor conducía, opte por jugar con la cámara del celular que mi hermano me había regalado la semana anterior y que no había podido usar, sacaba fotos a todo lo que me parecía fotografiable, pero seguía lamentándome por no haber asistido al curso, de un momento a otro resolví tomarle fotos a la muñeca que tengo puesta en la parte del panorámico del carro con la idea de hacerle contraste con los paisajes urbanos por los cuales estábamos pasando de camino a casa.
El día estaba por partes muy nublado como se puede ver en algunas de ellas, cruzamos el peaje rumbo al pueblo de Mosquera Cundinamarca, yo seguía jugando con la cámara haciendo contraste entre la muñeca de Regina 11 y el paisaje, de pronto en un lugar de la carretera el sol brillo de una manera muy especial de repente aparecieron unos círculos magentas como las luces de nuestros maestros, pensé que era el contraste entre el sol y el arco del lente de la cámara, continué tomando fotos, me pareció raro que estas luces magentas llegaran y se fueran, además el brillo del sol que como se constata en las fotos anteriores estaba muy escondido y opaco de un momento a otro se manifestara con esa magnitud tan fuerte como la que estaba registrando a través de la cámara, las luces llegaban y se iban. Suspendí las tomas y pensé que era producto de mi imaginación por no haber asistido al curso de mi maestra; pero también estaba maravillado con este suceso, estaba contento y a nadie de los que iban conmigo dije nada, pensé que no estaban preparados para ver este fenómeno además alguna excusa sacarían para desvalorar y ridiculizar lo que estaba sucediendo ante el lente de mi cámara volví nuevamente a poner el lente en la misma posición y allí estaban las luces que de un momento a otro se acercan a la muñeca se posan en ella como formando una chispa refulgente para luego irse definitivamente, seguí tomando fotos hasta la llegada del pueblo, pero ya no se volvieron presentar, durante los próximos días guarde silencio pensé en borrarlas, ya que consideraba que de pronto fuera un fenómeno normal o de pronto fuera mi mente calenturienta que se imaginaba cosas, pero recordé que un día unos amigos reginistas me pidieron el favor de tomarle unas fotos cuando la maestra se acercara y le pidieran el favor de tomarse las fotos con ellos para mandarlas a un familiar en los estados unidos, así fue pero cuando yo estaba enfocando la cámara y veía esos rostros a través de la lente también veía que mi maestra hacia unos ademanes como bajando desde mi corona hacia el suelo rayos imaginarios de luz yo me sentí atravesado por su mirada sonrisa y ademanes que entre risa y risa yo le decía; “madrecita, no haga eso” y ella seguía sonriendo terminamos las fotos; sin embargo todos comentamos de por que la maestra me estaba haciendo esos movimientos tan extraños, que cosa tan rara decían; eso es que ella vio algo. Yo como siempre de tanto respeto que le tengo quede pensando varios días después todo se olvido.
Para la semana siguiente al conducir mi vehiculo hacia mi casa siendo las 10:30 de la noche, de pronto en el carril de alta velocidad y en la parte mas oscura de la vía apareció estacionado un carro sin luces ni señales, al lado se encontraba un señor con una moto charlando con el del carro, y por la derecha me cerro el carril una buseta de servicio publico total ya no tenia escape y los frenos dieron lo que pudieron, lo mas increíble fue el salto que el conductor del vehículo estacionado allí dio para salvarse pues este se encontraba revisándole algo atrás justo donde recibió el golpe, dejando el carro de el averiado, y el mió totalmente acabado en la parte delantera. El de la moto también salio golpeado. No lo podíamos creer y ellos daban gracias a Dios y yo a mi maestra convinimos arreglar por las buenas aunque yo consideraba no tener que pagar nada por la imprudencia del señor por estar en esas condiciones allí parqueado sin luces, ni señales.
Resolví arreglar por las buenas, además por que vi en fracciones de segundo pasar toda mi vida y lo que aún me faltaba por vivir, vi en mi mente todo lo que pasaría y de lo que me había salvado, en ese preciso momento recordé a mi maestra y sus ademanes de la semana anterior con lo de las dichosas fotos, a la semana siguiente al choque me encontré con mis amigos y les comente lo sucedido y no lo podían creer, además por que ese día venían a mostrarle a la maestra las fotos que yo les había tomado y de cómo unos rayos de luz atravesaban las fotos inexplicablemente.
Ella les comento que eran las luces de los maestros que se habían manifestado allí, ahora quedo sorprendido que este fenómeno que se presento el día 25 de julio. Son dos de los fenómenos mas extraordinarios de los que quedan evidencias para los que tengan ojos vean y para los que tengan oídos escuchen, además aporto las fotos de los fenómenos anunciados y espero que no digan como siempre que se trata de algo de Regina 11, que es un montaje o que es producto de la casualidad, las fotos fueran tomadas en una vía de Colombia y no en la sede de Regina 11 y la cámara solo la tuvo en sus manos la maestra Regina hasta el día 16 de agosto aproximadamente cuando resolví presentarle las fotos a ver que opinaba, así como a algunos compañeros Letas.
Con este escrito no pretendo especular de ninguna manera sino; dejar constancia de que la maestra Regina 11 como nos lo ha prometido siempre estará protegiéndonos en todo momento y lugar para los que creemos en ella y los que no también.
Por mi parte siempre daré gracias por este encuentro en mi vida con mi maestra Regina 11, quien a lo largo de estos años siempre ha hecho los más maravillosos milagros de los que un ser humano pueda dar testimonio y de los cuales ya documente en ocasiones anteriores.
MARCO LINO MENDEZ
C. C. 19.440.255. ( Bogotá, Colombia ).
AGOSTO27 2008.